Autoridades informaron de la balacera de ayer por el caso de Sandra Domínguez, pero no dijeron si la encontraron o si tienen pistas de su paradero. Su madre exige respuestas.
Cierre del Congreso: del récord legislativo al caos interno
A pesar de las pugnas en Morena, la nueva legislatura cerró su primer periodo ordinario con una cifra histórica: la aprobación de 15 reformas constitucionales.
Autoridades informaron de la balacera de ayer por el caso de Sandra Domínguez, pero no dijeron si la encontraron o si tienen pistas de su paradero. Su madre exige respuestas.
Muchas reformas (y muchos pleitos). Análisis de Juan Ortiz.
POR JUAN ORTIZ / LUPA LEGISLATIVA
EMEEQUIS.– La nueva legislatura cerró su primer periodo ordinario con una cifra histórica: la aprobación de 15 reformas constitucionales. Este récord legislativo refleja, por un lado, la continuidad del legado de López Obrador, cuyas iniciativas dominaron la agenda. Por otro lado, también se evidencia el débil control político de Claudia Sheinbaum, quien enfrenta un Congreso marcado por pugnas internas de su propio partido.
EL RÉCORD LEGISLATIVO: 15 REFORMAS CONSTITUCIONALES APROBADAS
Estas reformas abarcan un espectro amplio de temas, desde justicia y seguridad hasta derechos sociales y cambios estructurales en la administración pública, entre las que destacan:
● Reforma Judicial: Un cambio que redefine el sistema judicial del país, enfocado a purgar más de 1,600 cargos de sus titulares, para luego ser sometidos a elección popular.
● Militarización de la Guardia Nacional: Ahora bajo mando operativo de la Secretaría de la Defensa Nacional, consolidando la presencia militar en tareas de seguridad pública.
● Derechos sociales: Se fortalecen las pensiones para adultos mayores y para personas con discapacidad, además de elevar a rango constitucional los programas Sembrando Vida, Precios de Garantía y Fertilizantes.
● Extinción de órganos autónomos: Con la desaparición del INAI, Cofece, IFT y Coneval, se concentra mayor control en el Ejecutivo sobre áreas clave como la transparencia, la regulación económica y la evaluación de políticas públicas.
Además de estas 12 reformas, el Congreso aprobó otras tres:
1. La reforma anti-impugnación, promovida por Ricardo Monreal y Adán Augusto López, fue concebida como un instrumento para impedir la posibilidad del Poder Judicial de invalidar la Reforma Judicial.
2. Dos iniciativas de Claudia Sheinbaum, que se centraron en garantizar la igualdad sustantiva, y en el fortalecimiento de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana con funciones de investigación e inteligencia, así como mayor control de fondo de seguridad.
Esta avalancha legislativa fue posible gracias a dos factores. Por un lado, las reglas electorales vigentes con el visto bueno de las autoridades electorales, que le permitieron a Morena una mayoría calificada en la Cámara de Diputados. Por otro lado, el apoyo de tres senadores de la oposición que se unieron al oficialismo: José Sabino Herrera y Araceli Sauceda (ex PRD), y Miguel Ángel Yunes (ex PAN).
Este movimiento permitió al oficialismo superar el umbral de votos necesarios para aprobar reformas constitucionales, dejando a la oposición prácticamente sin margen de maniobra.
REFORMAS PENDIENTES: LAS PRIORIDADES POSTERGADAS
A pesar del récord legislativo alcanzado con 15 reformas constitucionales aprobadas, algunas iniciativas del plan original de López Obrador enfrentan un futuro incierto:
● Reforma Electoral: Diseñada originalmente para modificar al Instituto Nacional Electoral (INE) y reducir costos en los procesos electorales, esta reforma fue postergada. Lo cual no es sorpresa. ¿Para qué cambiar el sistema electoral que te permitió llegar al poder y consolidar el control de ambas cámaras del Congreso?
● Reforma en materia de austeridad: Esta iniciativa buscaba reforzar la prohibición de que servidores públicos ganen más que el Presidente de la República, pero quedó sin discusión.
● Prohibición del maíz transgénico y concesiones de agua en zonas de escasez: Estas propuestas, junto con la prohibición del fracking y la minería a cielo abierto (salvo excepciones), también quedaron pendientes.
● Derecho a la salud integral, universal y gratuita: Este cambio buscaba garantizar constitucionalmente la atención médica integral, incluyendo cirugías, medicamentos y estudios médicos. Sin embargo, no logró avanzar.
● Jóvenes Construyendo el Futuro a rango constitucional: Este programa insignia del sexenio pasado, quedó fuera de las prioridades legislativas al permanecer congelado en el Senado.
UN CONGRESO SIN COHESIÓN: EL RETO PARA SHEINBAUM
El inicio del mandato de Claudia Sheinbaum ha dejado claro que su relación con el Congreso será mucho más complicada que la de su antecesor. Durante el sexenio de López Obrador, Morena operaba como una maquinaria disciplinada que impulsaba su agenda sin fisuras visibles. Ahora, las fracturas internas en el partido son evidentes, y la presidenta enfrenta un Congreso menos predecible y más dividido.
Un ejemplo claro de esta falta de cohesión fue la reelección de Rosario Piedra Ibarra al frente de la CNDH. A pesar de que Sheinbaum había manifestado públicamente su rechazo a las reelecciones, y de que su apuesta era Nashieli Ramírez, el Senado respaldó a Piedra.
En un escenario donde la oposición es débil, estas pugnas internas adquieren mayor relevancia, pues no solo afectan la capacidad de Sheinbaum para avanzar en su agenda, sino que también complican la construcción de un liderazgo fuerte y centralizado. ¿Es una buena noticia para la división de poderes? No, pues esa falta de liderazgo termina empoderando a otros personajes.
EL CHOQUE ENTRE MONREAL Y ADÁN AUGUSTO: PODER EN DISPUTA
El conflicto entre Ricardo Monreal, coordinador de los diputados de Morena, y Adán Augusto López, líder de los senadores del partido, ha sido uno de los episodios más claros de la fragmentación interna en Morena.
Esta pugna, que escaló tras la aprobación del Presupuesto 2025, expone la lucha por el control político dentro del Congreso de cara a la elección presidencial 2030.
La disputa comenzó con el recorte al presupuesto del Senado, impulsado desde la Cámara de Diputados bajo la dirección de Monreal.
En respuesta, Adán Augusto subió a tribuna para acusar a Monreal de irregularidades en su gestión como coordinador del Senado, señalando contratos presuntamente irregulares.
Monreal calificó estas acusaciones como “infundios políticos”, defendiendo la transparencia de su administración y sugiriendo que las críticas tenían motivaciones personales.
Sin embargo, el intercambio de señalamientos no quedó ahí. Legisladores como Gerardo Fernández Noroña añadieron tensión al conflicto, acusando a Monreal de desobedecer instrucciones presidenciales y calificando el recorte presupuestal como una “rudeza innecesaria”.
Este conflicto llegó a tal nivel que incluso terminó por ‘congelar’ la discusión de la reforma de vivienda impulsada por Claudia Sheinbaum. Posteriormente hubo una reunión entre ambos con la Secretaria Rosa Icela de mediadora, pero la división seguirá ahí.
Este esquema de “virreinatos legislativos” no sólo representa un riesgo para Sheinbaum, sino también para el país. En el mejor de los casos, este escenario puede resultar en parálisis y conflictos que poco tienen que ver con el interés público. En el peor, en la aprobación de más reformas sumamente dañinas para los mexicanos sin ningún tipo de contrapeso que les ponga freno.
La pregunta es si México podrá aguantar este nuevo tipo de liderazgos o si las fracturas internas seguirán debilitando los cimientos de la república. En cualquier caso, los ciudadanos serán quienes, una vez más, paguen el precio de un Congreso atrapado entre intereses personales.
@Juan_OrtizMX