En medio de una creciente ola de violencia que ha dejado más de mil homicidios en nueve meses, el gobierno federal y estatal acordó enviar 1,600 elementos más de fuerzas federales a Sinaloa, sumando ya 4,200 efectivos desplegados. La estrategia de seguridad fue revisada en Culiacán por Omar García Harfuch, el titular de la Defensa y el gobernador Rubén Rocha Moya. Aunque se anunció mayor presencia militar, cámaras y luminarias, persisten dudas sobre la efectividad de la militarización en un estado sumido en una disputa interna del Cártel de Sinaloa
Rechazan demanda de México contra armerías de EU: “son dos juicios”, dice Sheinbaum
"No se puede interponer una acción contra un fabricante si, como la de México, se basa en el uso delictivo del producto de la compañía por parte de un tercero", detalló la jueza Elena Kagan en la Corte,
En medio de una creciente ola de violencia que ha dejado más de mil homicidios en nueve meses, el gobierno federal y estatal acordó enviar 1,600 elementos más de fuerzas federales a Sinaloa, sumando ya 4,200 efectivos desplegados. La estrategia de seguridad fue revisada en Culiacán por Omar García Harfuch, el titular de la Defensa y el gobernador Rubén Rocha Moya. Aunque se anunció mayor presencia militar, cámaras y luminarias, persisten dudas sobre la efectividad de la militarización en un estado sumido en una disputa interna del Cártel de Sinaloa
La Corte dijo que no se puede culpar a las armerías por la violencia. En la imagen, destrucción de armas decomisadas en Acapulco. Foto: Cuartoscuro.com.
EMEEQUIS.– La Suprema Corte de Estados Unidos rechazó la demanda de México de responsabilizar a los fabricantes de armas estadounidenses por la violencia y las atrocidades de los cárteles de la droga.
La Corte dictaminó por unanimidad de nueve jueces que los fabricantes de armas de fuego están protegidos por la PLCAA (Ley de Protección del Comercio Legal de Armas) que protege a los fabricantes.
“No se puede interponer una acción contra un fabricante si, como la de México, se basa en el uso delictivo del producto de la compañía por parte de un tercero”, detalló la jueza Elena Kagan en la Corte sobre la demanda por 10 mil millones de dólares interpuesta en 2021 contra armerías como Smith & Wesson y el distribuidor Interstate Arms.
“Dado que la demanda de México no alega de manera plausible que los fabricantes de armas demandados ayudaron e incitaron a los distribuidores de armas a vender ilegalmente armas de fuego a traficantes mexicanos, la PLCAA (Ley de Protección del Comercio Legal de Armas) impide la demanda”, indicó el fallo unánime de los nueve magistrados de la Corte Suprema seis conservadores y tres progresistas.
La decisión se produce en un contexto de tensiones diplomáticas entre Estados Unidos y México por el tema de las drogas y las armas. Por un lado el presidente Donald Trump exige que México tome más medidas para frenar el flujo de drogas ilegales a Estados Unidos, especialmente fentanilo, y México quiere frenar el flujo de armas ilegales hacia el sur. México ha mantenido regulaciones más estrictas sobre armas de fuego que su vecino del norte.
Ante este panorama, la presidenta Sheinbaum sólo contestó en Estados Unidos: “Son dos juicios, vamos a ver cuál es el resultado y les informamos”.
EL EFECTO BUDWEISER
El 4 de marzo pasado, armerías estadounidenses se defendieron en la Suprema Corte de la demanda de México comparándose con la cerveza Budweiser, porque alegaron que ellos no son los responsables de la ola de violencia en México, así como la marca de cervezas no es culpable de los accidentes causados por la gente que consume su producto.
La Suprema Corte de Estados Unidos escuchó ese día los argumentos orales en la demanda presentada por el gobierno de México contra los fabricantes de armas estadounidenses, como Smith & Wesson e Interstate Arms.
En su defensa, la industria armamentística recurrió a una llamativa analogía: se compararon con la cervecera Budweiser para argumentar que no son responsables del uso que terceros hagan de sus productos.
Noel Francisco, abogado de las armerías, sostuvo que culpar a los fabricantes de armas por la violencia en México sería equivalente a responsabilizar a Budweiser por cada accidente causado por menores de edad que beben alcohol:
“Si México tiene razón, entonces todas las organizaciones encargadas de hacer cumplir la ley en Estados Unidos han pasado por alto la conspiración criminal más grande de la historia que opera justo delante de sus narices, y Budweiser es responsable de cada accidente causado por bebedores menores de edad, ya que sabe que los adolescentes comprarán cerveza, conducirán ebrios y chocarán”, ironizó ante los jueces Noel Francisco, el abogado que representa a las compañías de armas.
@emeequis