Claudia Sheinbaum destacó la importancia del diálogo y la unidad interna, mientras que Marcelo Ebrard señaló los impactos negativos inmediatos en sectores clave, como la automotriz y el comercio, que pondrían en riesgo millones de empleos y familias en Estados Unidos
El Centro Histórico de la CDMX es testigo de la historia y la protesta. Mientras el Zócalo se despeja tras la toma de protesta de Sheinbaum y Brugada, el Hemiciclo a Juárez sigue cercado, convertido en lienzo de denuncias: “¡VIVA PALESTINA LIBRE!”, “EL AGUA SE ESTÁ ACABANDO” y el inevitable +43 de Ayotzinapa
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Autoridades informaron de la balacera de ayer por el caso de Sandra Domínguez, pero no dijeron si la encontraron o si tienen pistas de su paradero. Su madre exige respuestas.
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Ayotzinapa 9 años: “Disculpa, no queremos molestar, pero este gobierno nos obliga a protestar"
Los gritos de exigencia al gobierno para que encuentre a los desaparecidos retumbaron por el centro de la capital del país, en medio del desencuentro de AMLO con los padres de las víctimas.
Claudia Sheinbaum destacó la importancia del diálogo y la unidad interna, mientras que Marcelo Ebrard señaló los impactos negativos inmediatos en sectores clave, como la automotriz y el comercio, que pondrían en riesgo millones de empleos y familias en Estados Unidos
EMEEQUIS.– A nueve años de la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, familiares, amigos, activistas y estudiantes, se reunieron en el Zócalo de la CDMX para exigir respuestas a este gobierno, que a últimas fechas ha tenido diferencias con el movimiento.
Ayer, el vocero de los padres de los normalistas desaparecidos, Vidulfo Rosales, acusó a López Obrador de dar una versión parecida a la “verdad histórica” deJesús Murillo Karam y acusó que el Ejército oculta datos. El presidente respondió que no confìa en “intermediarios” y defendió a la milicia.
La llegada de miles de manifestantes se empezó a dar desde medio día, sin embargo, los grupos que venían desde la Escuela Normal Rural Raúl Burgos empezaron a arribar a las calles del centro de la capital aproximadamente a las 5 de la tarde.
La CDMX ya estaba preparada para recibir a los manifestantes. Un día previo al 26 de septiembre, se colocaron barricadas en puntos estratégicos y se cerraron calles. Palacio Nacional, hogar actual del presidente López Obrador, fue rodeado con una cerca de metal y elementos del cuerpo policiaco también custodiaban la zona.
Previo a su llegada el ambiente en la capital era relativamente tranquilo, varios locales comerciales no abrieron hoy, mientras que otro tanto de personas prefería caminar a sus destinos debido a que por la manifestación no habría paso.
La convocatoria difundida en redes sociales marcaba como hora de salida las 16:00 desde el Ángel de la Independencia, pero la marcha se retrasó casi una hora, por lo que el primer contingente, formado por padres y familiares de los desaparecidos salió alrededor de las cinco.
Entre gritos de justicia y deseos de saber qué pasó con sus hijos, los padres llevaban carteles con la cara de los desaparecidos. Antes de iniciar su recorrido, los familiares y manifestantes celebraron una misa en honor a los estudiantes desaparecidos. Cabe mencionar que los familiares aún mantienen un plantón enfrente del Campo Militar 1A y están por definir si se retiran o permanecen en él.
Más atrás los manifestantes y activistas llevaban carteles que exigían justicia y con frases como: “Dónde están 43”. “Hombro con hombro, codo con codo, Ayotzi, Ayotzi, somos todos”, invadieron Reforma.
Durante su trayecto, frente al anti monumento dedicado a los jóvenes y ubicado en frente de Alameda Central, se realizó el pase de lista de los 43 normalistas desaparecidos. Los padres y familiares volvieron a exigirle al gobierno mexicano que los jóvenes estudiantes aparezcan.
“Disculpa, no queremos molestar, pero este gobierno nos obliga a protestar”.
La manifestación estuvo acompañada de estudiantes de la UNAM, escuelas normales y rurales que coreaban consignas como “Disculpa, no queremos molestar, pero este gobierno nos obliga a protestar”, “pueblo escucha tú hijo está en la lucha” o “ 39, 40, 41, 42, 43… ¡Justicia! Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
También se alcanza a observar diversos grupos de paersonas encapuchadas, vestidas de negro, que realizan pintas en las inmediaciones del Ángel de la Independencia, sobre Paseo de la Reforma. En los mensajes se lee: “Dónde están 43” o “justicia para Ayotzinapa”, entre otros.
Fue casi a las 19:00 que el contingente encabezado por madres y padres llegó al Zócalo capitalino, dónde se instaló un mitin para exigir justicia.
Los manifestantes entraron detrás del contingente principal, algunos golpeando las cercas metálicas; otros más se dispersaron y algunos más continuaron coreando las consignas, aunque poco a poco el Zócalo comenzó a vaciarse y sólo quedaron algunas personas pegando carteles con la cara de los desaparecidos o con consignas de justicia.
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