El gobernador Ramírez Bedolla dice que se está investigando por qué al asesino de Carlos Manzo lo abatieron después de un forcejeo.
Sheinbaum regalará su boleto del Mundial: ¿generosidad o miedo al abucheo?
Claudia Sheinbaum decidió regalar su boleto para el partido inaugural del Mundial 2026 a una niña, presentándolo como un gesto simbólico, pero sin aclarar si asistirá a la ceremonia. La decisión revive el recuerdo de los abucheos a los presidentes Díaz Ordaz y De la Madrid en 1970 y 1986.
El gobernador Ramírez Bedolla dice que se está investigando por qué al asesino de Carlos Manzo lo abatieron después de un forcejeo.
Las dos veces que ha habido Mundial en México los presidentes han sido abucheados. Foto: Daniel Augusto / Cuartoscuro.com.
EMEEQUIS.– Claudia Sheinbaum ha vuelto a poner el foco mediático sobre sí misma, esta vez no por una decisión política o administrativa, sino por su ausencia en el partido inaugural del Mundial 2026, que se celebrará en México, co-sede junto a Estados Unidos y Canadá. La presidenta anunció que regalará su boleto a una niña que ame el fútbol, un gesto que presentó como un símbolo de inspiración para la juventud.
Sin embargo, la pregunta que circula en círculos políticos y deportivos es inevitable: ¿realmente se trata de generosidad, o de una estrategia para evitar el riesgo de ser abucheada en un estadio lleno de pasión futbolera y mirada crítica?
En partidos de fútbol las tomas televisivas suelen captar a personalidades cada vez que cae un gol o surge un momento polémico, con las reacciones del público que conlleva al ver la imagen en las pantallas gigantes.
UNA DECISIÓN ANUNCIADA PERO POCO CLARA
Desde el 29 de agosto, Sheinbaum había adelantado que no asistiría al partido inaugural. Este lunes lo reiteró, emocionada, y subrayó:
“Le voy a dar mi boleto a una niña que no tenga la oportunidad de ir a la inauguración y que ame el deporte. El 001 se lo voy a regalar para que pueda soñar con el futbol”.
No obstante, no confirmó si asistirá a la ceremonia de arranque, prevista en el Estadio Banorte, antes conocido como Azteca. Al final de la conferencia, cuando una reportera le preguntó a distancia si acudiría al estadio, la presidenta guardó silencio, dejando abiertas las especulaciones sobre sus verdaderas motivaciones.

FÚTBOL Y POLÍTICA: EL FANTASMA DE LOS ABUCHEOS
México ha visto cómo los grandes eventos deportivos pueden convertirse en un escenario de expresión política. Los ejemplos más recordados sucedieron en los mundiales organizados por el país:
- México 1970 – Partido inaugural: México vs. URSS (31 de mayo)
El presidente Gustavo Díaz Ordaz fue abucheado al declarar inaugurado el torneo, apenas dos años después de la masacre de Tlatelolco en 1968. Los silbidos reflejaron la indignación de una sociedad que aún dolía por los hechos del 2 de octubre. El arquitecto Javier Ramírez Campuzano, testigo de la ceremonia, recuerda que la rechifla fue intensa, aunque menos dramática que la de 1986. - México 1986 – Partido inaugural: Bulgaria vs. Italia (31 de mayo)
El presidente Miguel de la Madrid enfrentó un rechazo masivo: cerca de 100,000 espectadores silbaron cada vez que se le mencionaba o hablaba, obligando a interrumpir parcialmente su discurso. La protesta estaba vinculada a la crisis económica y al descontento por la respuesta gubernamental al terremoto de 1985, que dejó miles de muertos y una devastación que aún dolía en la memoria colectiva.
Estos episodios demuestran cómo el fútbol puede servir como válvula de escape para el descontento social, transformando la inauguración de un mundial en un escenario político casi inevitable.
EL MUNDIAL 2026: ENTRE ENTUSIASMO Y TENSIÓN
México se prepara para recibir más de 5,5 millones de visitantes adicionales, y el Gobierno ha articulado un plan integral que incluye la modernización de aeropuertos, carreteras y estadios, además de la agilización de los procesos migratorios para reflejar la hospitalidad del país.
La seguridad es prioridad: la coordinación entre autoridades federales, estatales y municipales busca garantizar un entorno seguro para jugadores, visitantes y espectadores. Los directivos de los estadios y el sector privado han trabajado estrechamente para asegurar que la infraestructura esté lista para acoger el torneo más visto del planeta.
Tres estadios mexicanos serán sede de 13 partidos del Mundial, mientras que la FIFA habilitó 17 instalaciones adicionales como centros de entrenamiento. Paralelamente, Sheinbaum ha promovido el programa “México 2026”, con fiestas públicas y gratuitas que transmitirán los partidos y ofrecerán actividades culturales y recreativas en los 32 estados, asegurando que la justa mundialista llegue a todos los rincones del país.
ENTRE EL GESTO Y LA ESTRATEGIA POLÍTICA
El regalo del boleto de Sheinbaum a una niña es un acto que refleja sensibilidad y cercanía con la juventud, pero el silencio de la presidenta sobre su asistencia al estadio genera suspicacias. La pregunta que muchos se hacen es si el gesto también obedece a un cálculo político, inspirado en las históricas rechiflas de 1970 y 1986, donde el público expresó su descontento con los presidentes en pleno torneo.
Si bien Sheinbaum asegura que espera que los asistentes “salgan a divertirse, pese a la pasión que pueda generar la afición”, los antecedentes históricos sugieren que el estadio puede convertirse en un escenario donde política y deporte se entrelazan.
Por ahora, la presidenta mantiene un perfil discreto, y su decisión de regalar el boleto se lee como un equilibrio entre imagen pública, sensibilidad social y estrategia política, en medio de la expectación global que genera el primer Mundial realizado en tres países simultáneamente.
@emeequis
