Sesión de la ONU: Rusia y China enseñan los dientes por Maduro; México, neutral

División en la ONU.

EMEEQUIS.– Este martes 23 de diciembre, un día antes de Navidad, el Consejo de Seguridad de la ONU celebró una sesión de emergencia solicitada por Venezuela para debatir las “agresiones” de Estados Unidos, donde surgieron posturas encontradas entre aliados de ambos polos. 

En la sesión se abordó el bloqueo naval a petroleros sancionados y despliegue militar en el Caribe, enmarcado en la lucha contra el narcotráfico y presuntas actividades del “Cartel de los Soles”, con una postura firme de Estados Unidos amenazando con las más altas sanciones posibles. 

El debate se enfocó en la tensión bilateral entre Estados Unidos y Venezuela, más que en un apoyo directo o rechazo explícito al régimen de Nicolás Maduro en todos los casos.

Posturas a favor del régimen de Maduro, defendiendo su soberanía y condenando las acciones de EE.UU, comenzaron por la propia, Venezuela, en voz de Samuel Moncada, quien denunció “piratería internacional”, “agresión” y un intento de “colonización” por parte del vecino del norte, afirmando que no hay conflicto armado que justifique las medidas.

Rusia, con Vassily Nebenzia al micrófono, respaldó plenamente a Caracas, al advertir que las acciones de EE.UU. podrían ser un “marco” para intervenir en otros países latinoamericanos, por lo que expresó solidaridad con la soberanía venezolana.

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China se opuso a “todos los actos de unilateralismo y acoso” de Estados Unidos, defendiendo el derecho de Venezuela como Estado soberano a proteger sus intereses.

Nicolás Maduro interpretó el debate como un “apoyo abrumador” a Venezuela en temas de soberanía y comercio.

Sin embargo, hubo bastantes posturas en contra del régimen de Maduro y en favor de la presión de Estados Unidos manifestada recientemente en el decomiso de buques petroleros. 

Mike Waltz dijo que no reconoce a Maduro como presidente verdadero, lo acusó de liderar un “régimen ilegítimo” vinculado al narcoterrorismo, con el Cartel de los Soles y el Tren de Aragua como punta de flecha. 

Anunció sanciones “al máximo” para privarlo de recursos petroleros, justificando el bloqueo como medida contra el tráfico de drogas.

Francisco Tropepi, de Argentina, aplaudió la presión de Estados Unidos para “liberar al pueblo venezolano”. Calificó al régimen de Maduro como “ilegítimo” y exigió la liberación de presos políticos, incluyendo al argentino Nahuel Gallo. Criticó la crisis política, humanitaria y de derechos humanos que afecta la región.

Posturas neutrales o enfocadas en el diálogo fueron encabezadas por el secretario general de la ONU (a través de un briefing por Khaled Khiari). El organismo llamó al respeto del derecho internacional, moderación, desescalada y diplomacia para preservar la estabilidad regional, sin tomar partido directo.

Colombia condenó el “uso de la fuerza” y las “medidas coercitivas unilaterales” de EE.UU., pero sin respaldar de forma explícita a Maduro.

México, con Héctor Vasconcelos, insistió en su tradicional postura de libre determinación de los pueblos y no intervención. 

Manifestó su rechazo a medidas unilaterales, urgiendo a la ONU a evitar escalada (postura tradicionalmente neutral en conflictos internos venezolanos).

“Con base en los principios constitucionales de política exterior de México, en particular, la no intervención, la solución pacífica de controversias, la proscripción de la amenaza o el uso de la fuerza en las relaciones internacionales, y la lucha por la paz y la seguridad internacionales, reiteramos, firmemente, que sin importar del país o región de que se trate, el diálogo y la negociación son las únicas vías legítimas y eficaces para resolver, en el largo plazo, las diferencias existentes”, dijo Vasconcelos.

Brasil se ofreció como mediador y enfatizó el diálogo político sobre soluciones militares.

Francia pidió evitar una intensificación del conflicto entre Estados Unidos y el régimen de Nicolás Maduro, y pidió abrir canales de diálogo. 

El representante francés externó: “Francia pide que se evite toda intensificación de la situación que pudiera amenazar la paz y la seguridad en la región y más allá”, señaló el diplomático.

La sesión no resultó en resoluciones concretas, reflejando divisiones típicas en el Consejo (con veto potencial de Rusia/China a cualquier medida contra Venezuela). 

@emeequis