Autoridades informaron de la balacera de ayer por el caso de Sandra Domínguez, pero no dijeron si la encontraron o si tienen pistas de su paradero. Su madre exige respuestas.
García Luna, la compañía de Virgilio
Genaro García Luna sabe muchas cosas. Su paso por el CISEN, la Policía Federal, la Agencia Federal de Investigación y la propia secretaría, le dieron un panorama general del crimen y de sus redes de protección.
Autoridades informaron de la balacera de ayer por el caso de Sandra Domínguez, pero no dijeron si la encontraron o si tienen pistas de su paradero. Su madre exige respuestas.
Este miércoles se conocerá la condena de Genaro García Luna. Análisis de Julián Andrade.
CONFIDENTE EMEEQUIS
EMEEQUIS.– Cuando Genaro García Luna reciba su sentencia, que puede llegar a la cadena perpetua, pero que al menos significará dos décadas tras las rejas, se cerrará un primer ciclo desde su detención en Irving, Texas, el 9 de diciembre de 2019.
Pero vendrá otra etapa, ya que piensa apelar a la determinación y hasta ahora ha mantenido su alegato de inocencia.
Esto es significativo, porque colaborar con las autoridades en Estados Unidos puede significar beneficios para el reo. El propio García Luna lo escribió, revelando que le ofrecieron un trato, pero a cambio de involucrar a diversos personajes de la política, la justicia y el poder económico en México. No lo hizo.
Desde ahora se puede pronosticar la celebración cuando se anuncie el veredicto, porque en el gobierno de México han hecho de García Luna uno de sus grandes demonios y el pretexto para no encarar las urgencias de la seguridad inmediatas, entre ellas las del registro de homicidios más grande de la historia.
Hay que recordar que, en el último tramo de la administración de Felipe Calderón, los asesinatos tuvieron una disminución del 21% a nivel nacional y del 83% en Ciudad Juárez donde se implementó un robusto programa de prevención.
Más allá de la condena, la jurídica y la política, que recaerán en García Luna, la trama está todavía lejos de su resolución final, y seguramente nos enteraremos de vericuetos de uno de los asuntos de orden criminal, por los involucrados, más trascendente en décadas.
El juez Brian Cogan recibió decenas de cartas respaldando al reo 59 475-777 del Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn. Son misivas seleccionadas por la propia defensa, encabezada por César de Castro, por lo que tienen que ponderarse con la distancia debida, pero no por ello dejan de ser significativas, como la de Christia Mercer, profesora de Filosofía de Columbia, que pondera el interés de García Luna por Virgilio, Camus y Shelly.
Quizá a García Luna le impactaron aquellas líneas del propio Virgilio, quien apuntó: “la bajada al Averno es fácil y suave; las puertas de Dite están de par en par abiertas noche y día. Pero dar un paso atrás y volver a ver el cielo ¡eso sí que es tarea y empeño difícil!”.
Su abogado también señaló, con insistencia, que la mayor parte de la carrera de García Luna hay que observarla desde la perspectiva de apoyo a las agencias de seguridad al norte del Río Bravo.
En efecto, pocos policías contaron con semejantes niveles de confianza y que se expresó en colaboración y justo por ello tenía su residencia en Miami.
Hasta ahora es un misterio qué tanto sabían o no sabían de las andanzas del jefe policiaco y, cualquiera que sea la respuesta van a quedar muy mal parados. Este aspecto, como tantos otros, tarde o temprano se desvelará
El exsecretario de Seguridad sabe muchas cosas. Su paso por el CISEN, la Policía Federal, la Agencia Federal de Investigación y la propia secretaría del ramo, le dieron un panorama general del crimen y de sus redes de protección en todos los niveles.
Conoce bien a quienes la Fiscalía utilizó como testigos para establecer su presunta complicidad con el narcotráfico y en particular con el cártel de Sinaloa, ya que a varios de ellos los detuvieron bajo su gestión policiaca.
En el juicio no se presentaron grabaciones, fotografías o cuentas bancarias que dieran solidez a los dichos de los testigos, pero en las cortes de Estados Unidos eso no se requiere, porque los testimonios tienen un gran valor.
Pero su suerte está echada, es decir, los contornos de su futuro sólo tienen la oportunidad de la reducción de los años en prisión, al menos hasta la próxima apelación, lo que puede también demorarse.
@jandradej