José Ramiro “Pepín” López Obrador, hermano del expresidente y actual secretario de Gobierno de Tabasco, declaró poseer 13 ranchos de ganado valuados en más de 6.9 millones de pesos, de los cuales ocho fueron comprados durante el sexenio de AMLO. Aunque asegura que todo es fruto de su esfuerzo, las adquisiciones —algunas pagadas en efectivo— han desatado sospechas de enriquecimiento y contradicen el discurso de austeridad familiar. José Ramiro “Pepín” López Obrador, hermano del expresidente y actual secretario de Gobierno de Tabasco, declaró poseer 13 ranchos de ganado valuados en más de 6.9 millones de pesos, de los cuales ocho fueron comprados durante el sexenio de AMLO. Aunque asegura que todo es fruto de su esfuerzo, las adquisiciones —algunas pagadas en efectivo— han desatado sospechas de enriquecimiento y contradicen el discurso de austeridad familiar.
Trump y Putin rompen el hielo en Alaska… pero no logran la paz en Ucrania
En Alaska, Donald Trump y Vladimir Putin cerraron su primera cumbre en cuatro años sin un acuerdo de alto al fuego en Ucrania, pero con promesas de continuar el diálogo. Ambos destacaron avances y la voluntad de mejorar las relaciones, aunque persisten profundas desconfianzas y tensiones
José Ramiro “Pepín” López Obrador, hermano del expresidente y actual secretario de Gobierno de Tabasco, declaró poseer 13 ranchos de ganado valuados en más de 6.9 millones de pesos, de los cuales ocho fueron comprados durante el sexenio de AMLO. Aunque asegura que todo es fruto de su esfuerzo, las adquisiciones —algunas pagadas en efectivo— han desatado sospechas de enriquecimiento y contradicen el discurso de austeridad familiar. José Ramiro “Pepín” López Obrador, hermano del expresidente y actual secretario de Gobierno de Tabasco, declaró poseer 13 ranchos de ganado valuados en más de 6.9 millones de pesos, de los cuales ocho fueron comprados durante el sexenio de AMLO. Aunque asegura que todo es fruto de su esfuerzo, las adquisiciones —algunas pagadas en efectivo— han desatado sospechas de enriquecimiento y contradicen el discurso de austeridad familiar.
EMEEQUIS.– La esperada reunión entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, concluyó este viernes sin un acuerdo formal para un alto al fuego en Ucrania, aunque ambos mandatarios afirmaron que hubo avances importantes y que el diálogo continuará.
Trump resumió el resultado con una frase que ya se ha vuelto característica en su discurso diplomático: “No hay un acuerdo hasta que no haya un acuerdo”. Aunque evitó detallar compromisos concretos, aseguró que la conversación con Putin fue “extremadamente productiva” y adelantó que llamará al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para informarle de lo discutido.
“Voy a hablar con el presidente Zelenski sobre lo de hoy. Hemos resuelto varios puntos y es muy probable que lo logremos en las próximas rondas”, dijo el mandatario estadounidense, quien en un inicio había planteado como objetivo central de la cumbre lograr un cese inmediato de hostilidades entre Rusia y Ucrania, pero que al final apenas hizo mención a esa meta.
PUTIN: “LA PRÓXIMA VEZ EN MOSCÚ”
El presidente ruso, por su parte, agradeció la mejoría en el clima bilateral después de años de tensión, subrayando que esta ha sido la primera cumbre de alto nivel entre Moscú y Washington en cuatro años. “Este período ha sido muy difícil para las relaciones bilaterales. Francamente, han caído a su punto más bajo desde la Guerra Fría”, afirmó.
Putin incluso propuso que la próxima reunión se realice en Moscú y envió un mensaje directo a Kiev y a las capitales europeas: que actúen de forma “constructiva” y eviten “provocaciones e intrigas” que obstaculicen el incipiente progreso.
El líder ruso también señaló que, para poner fin a la guerra, es necesario abordar las “causas profundas” del conflicto —aunque evitó especificarlas— y expresó coincidencia con Trump en la necesidad de garantizar la seguridad de Ucrania como parte de cualquier acuerdo de paz. “Estamos dispuestos a trabajar en ello. Espero que lo acordado hoy nos acerque al objetivo de la paz”, dijo.
UNA RELACIÓN MARCADA POR LA DESCONFIANZA
La reunión de Alaska se desarrolló bajo un contexto de mutua desconfianza. Trump y Putin mantienen desde hace años un trato personal cordial, pero las relaciones institucionales entre sus países se han visto afectadas por las acusaciones de injerencia rusa en las elecciones estadounidenses de 2016 y por las sanciones impuestas tras la invasión de Ucrania en 2022.
Trump, fiel a su estilo, retomó durante la conferencia varios de sus temas recurrentes: su “larga relación” con “Vladimir”, las quejas por ser blanco del “engaño ruso” en 2016 y la idea de que un acuerdo podría alcanzarse en su próximo encuentro.
PRÓXIMOS PASOS
Aunque el alto al fuego no se materializó, Trump aseguró que contactará a los aliados de la OTAN para coordinar una estrategia común. También se comprometió a mantener el canal abierto con Putin para intentar resolver los puntos pendientes.
Ambos líderes reconocieron que el camino hacia la paz en Ucrania sigue siendo complejo, pero coincidieron en que, tras años de tensiones congeladas, su diálogo representa un primer paso para recomponer la relación entre dos potencias que, en palabras de Putin, “han sabido cooperar en el pasado, incluso en los momentos más difíciles”.
@emeequis