El origen de la foto de Bermúdez Requena que se hizo viral en redes sociales es una reunión de secretarios de seguridad de julio de 2023, en la que Rosa Icela pronunció unas palabras que se volverían proféticas.
El hombre que horneó el futuro: muere Roberto Servitje, cofundador de Bimbo
Roberto Servitje Sendra, cofundador de Grupo Bimbo y artífice de su expansión global, falleció este jueves a los 97 años. Ingresó a la empresa en 1945 como supervisor de ventas y décadas más tarde asumió la dirección general, consolidando al grupo como la panificadora más grande del mundo. Bajo su liderazgo, Bimbo se expandió nacional e internacionalmente con un enfoque centrado en valores sociales y humanos. La noticia de su muerte coincidió con el anuncio de una inversión histórica de la empresa por 2 mil millones de dólares en México
El origen de la foto de Bermúdez Requena que se hizo viral en redes sociales es una reunión de secretarios de seguridad de julio de 2023, en la que Rosa Icela pronunció unas palabras que se volverían proféticas.
Roberto Servitje fallece a los 97 años y deja un legado de filosofía empresarial. Foto: Cuartoscuro.com.
EMEEQUIS.– En el corazón de México, entre hornos, rutas de reparto y oraciones discretas, se forjó una de las figuras más influyentes del empresariado nacional: Roberto Servitje Sendra, cofundador de Grupo Bimbo, quien falleció este 17 de julio de 2025 a los 97 años, dejando mucho más que una panificadora global: dejó una filosofía de vida empresarial.
El anuncio de su partida no vino de la compañía que ayudó a edificar, sino de un obispo. Monseñor Francisco Javier Acero, con quien compartía no solo devoción católica, sino también la convicción de que la Doctrina Social de la Iglesia debía permear hasta la última rebanada de pan. “Empresario católico, enamorado de México”, escribió el prelado. Y no exageraba.

UN JOVEN QUE AMASÓ OPORTUNIDADES
Corría 1945 cuando un adolescente de 17 años ingresó a una pequeña empresa recién fundada: Bimbo. No se trataba de una historia de privilegio: aunque su hermano, Lorenzo, era uno de los fundadores, Roberto comenzó desde abajo, supervisando ventas, conociendo rutas, entendiendo al cliente.
Pero su visión iba más allá del mostrador. No tardó en imaginar cómo crecer, cómo llevar el pan más allá del Valle de México. Así fue como en 1954 emprendió hacia Guadalajara para fundar Bimbo Occidente, abrir mercados, construir una planta, trazar rutas, y sembrar confianza.
Años después, tras una estancia en Harvard, regresó no como el heredero de un imperio, sino como el arquitecto de su profesionalización. Bajo su mando como director general, presidente ejecutivo y luego presidente del Consejo de Administración, el Grupo se multiplicó: de 13 fábricas a más de 50, de un país a más de 30.
UN LIDERAZGO DE LEVADURA MORAL
Pero el legado de Servitje no solo puede medirse en rebanadas vendidas. Su verdadero aporte fue cocer una empresa en donde el humanismo no fuera discurso de lobby, sino fermento diario.
Convencido de que una empresa debía ser más que rentable, promovió principios como la equidad, la responsabilidad ambiental, el compromiso con el trabajador, y una política de crecimiento que no olvidara a la comunidad.
Por eso, no resulta casual que el mismo día de su fallecimiento, Grupo Bimbo anunciara una inversión de dos mil millones de dólares en México, que incluye la modernización de plantas y la incorporación de vehículos con bajas emisiones. Una visión que él mismo cultivó desde antes de que la sostenibilidad estuviera de moda.
PAN PARA HOY, MODELO PARA EL MAÑANA
En un país con empresariado muchas veces distante, Roberto Servitje construyó otra narrativa. La de un líder que prefería el perfil bajo, pero no el bajo compromiso. La de un creyente que no predicaba con sermones, sino con políticas. La de un empresario que supo que los negocios no se heredan: se reinventa su ética todos los días.
Hoy se apaga su vida, pero su receta queda horneada en cada decisión que hace de Bimbo una empresa distinta. Porque Roberto Servitje no solo ayudó a fundar una empresa. Fundó una forma de entenderla.
Descanse en paz.
@emeequis