La vida de una madre tras el feminicidio de su hija

Laura Durán Guerrero volvió a convertirse en madre 31 años después, al hacerse cargo de sus nietos tras el feminicidio de su hija Araceli; también María Margarita Alanís Rosales, madre de Campira, ambas con apoyos insuficientes para lidiar con la terrible realidad de dolor y muerte